Funcionarios del gobierno Nacional, organizaciones de derechos humanos, ex detenidos desaparecidos y organizaciones sociales confluyeron hoy en Av. Caseros y Pichincha para iniciar la etapa final de demolición de la estructura inaugurada en 1979 por el represor Jorge Rafael Videla "Esto fue inaugurado con bombos y platillos como si fuera una gran obra, una gran conquista y solamente fue preparada para torturar, para quebrar moralmente y espiritualmente a una generación", señaló el presidente Néstor Kirchner.
En tal ocasión, el primer mandatario se dirigió a los presentes haciendo mención a la próxima etapa de este gobierno en la cual hay que “consolidar profundamente esta política que todos nosotros creemos respecto a derechos humanos, garantías individuales, recuperación, reeducación de muchos presos comunes”.
Néstor Kirchner aprovechó para recordar etapas oscuras del pueblo argentino y recalcó que “a un país sin ideas y sin ideologías le pasa lo que nos pasó a nosotros durante la dictadura y después de ella”.
Junto a la presidenta electa, Kirchner anunció que en el predio próximamente se realizarán diversas obras, desde el gobierno de la ciudad, que llenarán de vida este lugar que antes era frío y antihumano. Están planificadas varias iniciativas como la construcción de viviendas, un centro cultural y vecinal, una escuela y espacios verdes, dándole un lugar primordial a la memoria.
“Aquí detenían a argentinos y argentinas porque pensaban diferente, los encerraban en estos muros para enterrarlos en vida”, dijo Nestor Kirchner.
"Se está liberando pensamientos, se están liberando ideas que no se pueden encerrar por mucho tiempo. Se podrán encerrar por algunas horas, por algunos días, pero la verdad, la memoria, la justicia, la dignidad, el apegarse firmemente al convencimiento de un país mejor nunca más se va a poder encerrar en muros como este. Miren cómo se cayeron: venció la idea", resaltó el primer mandatario.
"Es el triunfo, el triunfo de la dignidad, el triunfo de la idea, el triunfo del que se puede", enfatizó el presidente Kirchner.
Cristina junto a Verónica Trumino de la
Juventud del MUP -Parque Patricios -
UN POCO DE HISTORIA
En 1979, Jorge Rafael Videla habilitó la cárcel de Caseros con la detención de un grupo de presos políticos y dirigentes sindicales, donde convivieron durante años presos comunes y políticos.
Esta fue la más grande de Sudamérica, con 85 mil metros cubiertos, 23 plantas, 2096 celdas individuales, 14 ascensores y 16 patios de recreo, con celdas de 1,80 por 2 metros.
En 2000 se decidió su cierre porque se la consideraba inhumana. Los últimos detenidos, alojados en la cárcel vieja, fueron trasladados en agosto de 2001.
Finalmente, el 22 de agosto del año pasado se firmó un convenio con el Ejército por 7 millones de pesos para que éste se encargara de tirar abajo la cárcel.
El 14 de noviembre de 2007 se inició el tramo final de la demolición de la cárcel, que se convertirá en una escuela y un centro cultural el próximo año.
En 1979, Jorge Rafael Videla habilitó la cárcel de Caseros con la detención de un grupo de presos políticos y dirigentes sindicales, donde convivieron durante años presos comunes y políticos.
Esta fue la más grande de Sudamérica, con 85 mil metros cubiertos, 23 plantas, 2096 celdas individuales, 14 ascensores y 16 patios de recreo, con celdas de 1,80 por 2 metros.
En 2000 se decidió su cierre porque se la consideraba inhumana. Los últimos detenidos, alojados en la cárcel vieja, fueron trasladados en agosto de 2001.
Finalmente, el 22 de agosto del año pasado se firmó un convenio con el Ejército por 7 millones de pesos para que éste se encargara de tirar abajo la cárcel.
El 14 de noviembre de 2007 se inició el tramo final de la demolición de la cárcel, que se convertirá en una escuela y un centro cultural el próximo año.
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